La Juventud de hoy en día.


Desde que me cambié de pega y ahora tengo que pegarme piques de hora y media de la casa al trabajo tengo mucho tiempo para examinar a la gente en la micro.
Iba yo sin más un día después del trabajo sentada y a punto de quedarme dormida cuando ahí frente a mí aparece el hombre más guapo que he visto en el último tiempo. Demás está decir que me desperté de una, y que no podía dejar de mirarlo. Traté de ser lo menos sicópata posible así que me dedique a mirarlo por el reflejo de la ventana, así casi babeando.
Unos quince minutos después se sube una señora con una niña de unos cuatro o cinco años y se sientan justo en el asiento delante al mío y parece que a la niñita también le gustó el cabro.
Así que ahí estabamos en una clara competencia por el hombre en cuestión, hasta que ella llega y lo saluda, ¡cara de raja! wea que yo no hubiera hecho sin al menos sus dos tequilas en el cuerpo. Y lo peor de todo es que él le respondió y se pusieron a conversar!
No puedo creer que caí tan bajo al envidiar a una cabra chica. Osea jelou! no, mal. Yo que me creía la wna lanzá, que de hecho tengo fama de jote, y aún así una niña de cuatro años me ganó!

Me vino el viejazo de golpe :P

2 comentarios:

Natilla 24 de julio de 2011, 14:40  

Jajajaja, morí de la risa, la niñita se las traía. Creo que la juventud le jugó a favor, ella claramente no debe pasarse los rollos, tener los prejuicios ni cargar con las trancas que la gran mayoría parece que vamos ganando con la edad. En estos casos, creo que la inocencia infantil y su mirada al mundo es demasiado priceless y envidiable.
Un beso (volví al mundo de los blogs, le tengo blog nuevo!!!)

Lucia D 3 de septiembre de 2011, 15:05  

Jajajaja, ay que risa. Que niña tan salía. Pero bueno, son cosas que pasan. Adoro tu blog y tu forma de escribir. Postea más seguido! Un beso.

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